Previo a la realización de cualquier proyecto o plan es necesario su sometimiento a un procedimiento de evaluación ambiental para evaluar su incidencia en el medio ambiente, tanto en el medio natural, físico como en el social. La normativa ambiental establece dos tipos de tramitaciones si se trata de proyectos o planes (ordenación del territorio, regadíos,…). Y dentro de ellos se divide en dos procedimientos más o menos exhaustivos según la envergadura y tipo de proyecto.
Los pasos que se han de seguir para llevar a cabo este procedimiento son:
- Definición del proyecto o el plan y estudio detallado de todas sus vertientes, lo que permitirá detectar posibles impactos posteriormente.
- Realización rigurosa del inventario ambiental: aguas, suelo, aire, medio natural y socio economía.
- Selección de los indicadores más adecuados que servirán para determinar el verdadero impacto de la actuación.
- Identificación y valoración de impactos. Es la fase principal del estudio.
- Propuesta de medidas correctoras y compensatorias si fuera necesario.
Dentro de este procedimiento tienen lugar periodos de información pública para que los interesados o afectados aporten sus sugerencias o alegaciones. Los miembros de APIAC también redactan informes que sirvan para respaldar técnicamente estas alegaciones.